El Lolaberinto

graduados

Este viernes se han graduado mis alumnos de 2º de Bachillerato. Ellos empezaron el instituto a la vez que yo, hace 6 años, con lo que en parte siento que me estoy graduando un poco yo también (me hará más ilusión aún cuando empiece a cobrar mi primer sexenio, todo sea dicho). Fui tutora del grupo el año pasado y este año he seguido con ellos y ha sido mi primer año como profesora de 2º de Bachillerato, toda una experiencia.

Muchos quieren hacer Medicina y no les llegará la nota. Otros harán Biología, Farmacia u Odontología. Alguno dejará la elección para septiembre pero mañana también vendrá a clase de repaso. Nunca interrumpieron una explicación y nunca tuve que pedirles silencio. Yo entendí su necesidad de usar el Whatsapp y ellos entendieron mi obligación de no permitírselo en clase. Creo que me dieron bastante más de los que yo les di, pero sé que muchos recordarán las clases, porque notaba que estaban igual de cómodos que yo, igual de entretenidos. No miraban el reloj y ponían una mueca de satisfacción cuando la integral salía como tenía que salir.

Subieron a recoger su diploma tan guapos y tan guapas, con corbata incómoda y tacones imposibles, con los nervios apretándoles el pecho y con ganas de celebrar que se acababa un curso tremendamente difícil. Y yo les miraba desde abajo muy orgullosa y un poquito emocionada, lo reconozco. Ahora "sólo" les queda la PAU, bah, nada, un trámite. Sé que están bien preparados y sé que llegarán a la universidad sabiendo que han pasado seis años felices en los que los profesores se sabían sus nombres la primera semana de clase.

Hoy casi todo lo que la sociedad dice de ellos, de los chavales de 17 años, es negativo: no estudian, no tienen nivel, no tienen educación, no van a tener trabajo, no tienen valores... Mentira cochina. No sé si será que he tenido suerte o que tengo una percepción poco objetiva, pero el grupo que he tenido ha acabado sabiendo las mismas matemáticas que yo supe en COU pero además tiene una capacidad infinitamente mayor para desenvolverse por el mundo. A hurtadillas leo sus tweets y me sorprendo de su ingenio, disfruto con sus conversaciones, me gusta la madurez de sus consejos y sonrío porque ponen todas las tildes. Y quiero que se coman el mundo porque el mundo está puesto para ser comido por ellos.

|2012-05-20 | 20:16 | educacion | Este post |

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Comentarios

1

De: ru Fecha: 2012-05-20 23:09

(lagrimita)

2

De: Salamandra Fecha: 2012-05-21 09:26

Las generalizaciones son tan peligrosas, eso de decir «todos»...

Estoy intentando recordar mi ceremonia de graduación de COU y no la recuerdo. O no fui o tengo que hablar con un neurólogo.

Y creo que el mérito es mucho de ellos y un poco tuyo y de tus compañeros.

3

De: Palimp Fecha: 2012-05-21 10:56

La juventud va a peor desde que el mundo es mundo. Cada generación es peor que la anterior... tienen menos valores, son más vagos, blablabla.

Va a ser que no.

A ver si los viejos, por una vez, dejamos de decir las tonterías de siempre.

4

De: Salamandra Fecha: 2012-05-23 09:14

También pensaba en lo mismo que Palimp, y recordé que tampoco los tomates saben a lo que sabían antes.

Cosas de viejos.

5

De: Lola Fecha: 2012-05-23 10:40

Yo creo que de media, antes había un nivel "intelectual" más alto pero contando con un porcentaje mucho más pequeño de la población. Ahora he cambiado mi concepto de intelectualidad, pero sí es cierto que el grupo de gente con el que yo trabajo puede que no sea representativo de la juventud.

Yo a veces recuerdo estas cosas de Aristóteles cuando me sacan de mis casillas: http://solveigphilo.blogspot.com.es/2010/12/el-caracter-de-los-jovenes-aristoteles.html

Y sí, los tomates saben peor desde hace unos años. Y la medicina va mucho mejor, ¿no?