Tras 30 minutos factorizando polinomios en 1º de bachillerato (de sociales) y haber hecho cuatro ejemplos, todo con raíces simples (el que sepa de qué va el tema, sabrá que son todos iguales), levanta la mano y me pregunta tras el último ejemplo (en el que yo acababa de factorizar un polinomio de grado 3):
-Entonces si yo en el examen lo que hago es multiplicar (x-1)·(x-2)·(x+2), ¿valdría? Debería valer, ¿no? Porque yo creo que en el fondo fondo fondo es lo que queremos hacer, ¿no?
Pero es que eso es un error habitual. Es muy común que el árbol no te deje ver el bosque: es muy común que la gente aprenda a factorizar polinomios y no sepa para qué sirve eso.
Yo tuve un excelente profesor de Cálculo, y más adelante Álgebra, en la carrera (Rafael Sendra, aquí tenéis su currículum: http://www2.uah.es/rsendra/). El hombre iba a clase sin ningún libro ni nada, todo estaba en su mente. Comenzaba por darnos una charlita, sin escribir nada, sobre qué íbamos a ver durante la clase de ese día, y para qué servía, y cómo íbamos a llegar a ello. Sólo después comenzaba a escribir desarrollos teóricos en la pizarra.
Por ejemplo, para explicarnos los desarrollos en series de Fourier, antes de escribir ni una coma nos contó toda la historia, nos contó para qué se utilizaban las series de Fourier en el mundo real (en Teleco se utilizan para modelar cualquier señal en forma de una suma de señales periódicas sinusoidales, con las ventajas que ello conlleva), y nos resumió anticipadamente en qué iba a consistir la clase. Una vez que se hubo asegurado de que todos comprendíamos qué íbamos a ver, para qué iba a servir, y que sabíamos qué íbamos a hacer durante esa hora, comenzó. ¿Dudas? Ninguna.
La educación, la igualdad y la pescadilla: Hay derecho a obligarle a un profesor a explicarle polinomios a un niño con un coeficiente intelectual de 80? Hay derecho a obligarle a un niño con un coeficiente intelectual de 80 a que le expliquen polinomios?
En Compensatoria (durante 1º y 2º de eso), estos chavales salen en las horas de lengua y matemáticas para recibir un refuerzo pormenorizado y mucho más individualizado, rebajando los contenidos en función de la capacidades. En Diversificación (durante 3º y 4º de eso), un máximo de 15 chavales entran en el grupo, donde se les da los contenidos de lengua-historia-geografía ("ámbito socio-lingüístico") y matemáticas-física-química-biología ("ámbito científico-tecnológico") de un modo más comprensible, bajando un poco los contenidos y evaluando mucho más el trabajo en casa y en clase.